Me acurruco en mi cama cansada de pensar, de sentir que la vida avanza, continua, sin poder pararla.
Quisiera acabar con todo, detener las agujas del reloj, sentir que no tengo limitaciones, que nada acaba.
Pasarme una eternidad contemplando las estrellas; saborear el dulce y placentero sabor del helado de chocolate que nunca acaba; acostarme bajo la intensa lluvia; ver cien veces la misma pelicula, sentirla, reir, llorar...
Pero todo se convierte un una bonita utopia.
Yo, que sigo acurrucada en mi cama, egoista con migo misma, me pierdo entre lagrimas saladas, me desvanezco entre las sábanas.

Ahogada en un mundo terrenal. Busco una salida, pero no la logro encontrar.
Intento escribir, decir con palabras lo que siento, pero es imposible, ninguna palabra seria lo suficientemente adecuada ni correcta, ninguna palabra podria expresar ni la mitad de lo que siento. Pero para eso estamos, para intentar decir un atajo de palabras sin sentido, desahogarnos y que el resto del mundo lo lea.no soy coherente, ni pretendo serlo.
no pretendo que nadie me entienda.